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Los limpiaparabrisas son fundamentales para tener una visión clara y conducir de manera segura, pero muchas veces se pasan por alto hasta que fallan. Cambia tus limpiaparabrisas con regularidad para que, cuando estés en la autopista durante un chaparrón o en la primera tormenta de nieve de la temporada, no tengas que intentar ver a través de un parabrisas lleno de vetas.
La mayoría de los expertos coinciden en que deberías cambiar las escobillas cada seis meses, ya sea con el cambio de estaciones o por el desgaste del uso cotidiano. Incluso hay escobillas diseñadas especialmente para el invierno, más eficaces frente a la nieve y el hielo. Sin embargo, el factor más importante es la condición de las escobillas.
Si están dañadas o demasiado gastadas, probablemente notes estas señales:
Manchas o menor contacto: revisa si hay algo adherido a las escobillas, como trozos de hielo, o si presentan daños visibles.
Movimientos anormales e irregulares: un recorrido con sacudidas puede indicar problemas como un cable roto o un brazo torcido.
Daño visible: bordes rotos o corrosión. Recuerda que las escobillas están diseñadas para limpiar superficies húmedas. Usarlas sobre una superficie seca aumenta la fricción y acelera el desgaste. Además, factores como los solventes del líquido limpiaparabrisas, los desechos de la carretera, el hielo y la exposición a rayos UV también contribuyen a su deterioro.
Cambiar los limpiaparabrisas viejos es fácil. Sigue estos cuatro pasos para instalar un juego nuevo:
Encuentra el tamaño correcto de las escobillas.
Verifica las conexiones de los limpiaparabrisas.
Cambia cada escobilla de a una por vez.
Prueba los limpiaparabrisas.
La mayoría de las escobillas de limpiaparabrisas están diseñadas para adaptarse a una amplia gama de vehículos con la ayuda de adaptadores de conexión. Necesitarás conocer la longitud de las escobillas que se ajustan a tu vehículo. Normalmente, las escobillas delanteras tienen dos longitudes diferentes y se compran por separado.
Revisa el manual del propietario de tu vehículo para determinar qué tipo de escobillas debes comprar. Si no tienes el manual a mano, estas opciones pueden ser útiles:
Mide manualmente todas las escobillas (lado del conductor, lado del pasajero y trasera). Mide solo el componente de goma (no el brazo de metal).
Usa una herramienta en línea confiable para buscar las escobillas correctas según la marca, modelo y año de tu auto. La mayoría de las marcas de escobillas, como Rain-X, también ofrecen una herramienta para encontrar el tamaño que necesitas.
Pide ayuda en una tienda local de repuestos de auto. Debes estar listo para indicar la marca, modelo y año de tu auto.
Ten en cuenta que hay dos opciones principales: escobillas de goma o de silicona. Las escobillas de goma son la opción estándar y más asequible. Las escobillas de silicona suelen durar el doble y son ideales para condiciones climáticas extremas.
Car and Driver clasificó las mejores escobillas de limpiaparabrisas de 2024 en su revisión anual:
Rain-X® Latitude® con repelencia al agua (mejor opción general)
Bosch Icon (excelente opción; instalación fácil)
Trico® Flex (mejor opción económica)
Rain-X Silicone Endura® (mejor opción premium)
La mayoría de las escobillas de los limpiaparabrisas tienen conectores fáciles de usar que simplifican el proceso de instalación por tu cuenta. El gancho en J es el tipo más frecuente, seguido de los diseños con pasador lateral y bayoneta. El conector de tu vehículo determina cómo instalarás las nuevas escobillas.
Verifica este detalle antes de iniciar la instalación para ahorrar tiempo y evitar confusión o frustración.
Aquí tienes algunos videos de referencia útiles:
Cambia tus escobillas de a una a la vez para proteger el parabrisas de daños accidentales que podrían dar lugar a un reclamo por el cristal del auto. Como precaución, coloca un trapo doblado sobre el parabrisas, debajo del brazo levantado. Esto también ayuda a garantizar que siempre tengas una escobilla funcional y correctamente conectada como referencia.
Levanta un brazo del limpiaparabrisas, tirando de él hasta que esté completamente extendido y se mantenga por sí solo cuando lo sueltes.
Saca del empaque la escobilla de la misma longitud, ajustando el conector si es necesario.
Ubica la lengüeta o botón de conexión donde la escobilla se une con el brazo y quita la escobilla vieja.
Desliza la escobilla nueva en su lugar. Normalmente sentirás o escucharás un clic cuando quede asegurada.
Baja suavemente el brazo del limpiaparabrisas para que la escobilla quede apoyada de manera plana contra el parabrisas.
Repite estos pasos con la otra escobilla.
Después de instalar las escobillas nuevas, pruébalas. Usa el líquido del limpiaparabrisas o vierte agua sobre el parabrisas y luego activa los limpiaparabrisas. Si las instalaste correctamente, se moverán de manera suave y pareja sobre el vidrio, sin dejar rayas, sin saltar partes y sin hacer ruidos de golpeteo.
Las tareas de mantenimiento simples pueden parecer pequeñas, pero cumplen una función importante en tu protección y en la de tu vehículo con el paso del tiempo. Explora los artículos de nuestro Centro de Recursos para aprender más sobre el mantenimiento básico del auto:
Cómo proteger tu vehículo de daños por condiciones climáticas
Cuestiones básicas del mantenimiento del auto: una guía ilustrada
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